Baños fríos o duchas frías: ¿cuál elegir?

Hay muchas razones por las que las personas eligen los baños de hielo como parte de su rutina de bienestar. Estos baños de hielo pueden ser una valiosa adición a su búsqueda de bienestar general, superando incluso la eficacia de las duchas frías. Después de haber experimentado un baño de hielo y haber sentido sus beneficios, es probable que no quiera volver atrás.

Este artículo analizará los múltiples beneficios potenciales que podría obtener de la terapia de inmersión en agua fría y explicará por qué un baño de hielo, como el baño Icepiration, es más efectivo que una simple ducha fría.

Baños de hielo vs. Duchas frías: estimulación del nervio vago

Las investigaciones han demostrado que sumergirse en agua fría puede aliviar el estrés al activar el nervio vago . Si bien las duchas frías pueden lograr este efecto hasta cierto punto, los baños de hielo lo van aún más lejos. El nervio vago podría ser la clave para un bienestar general óptimo.

A diferencia de las duchas frías, llega un momento en el que el agua ya no se puede enfriar más. Los baños de hielo superan este límite, permitiendo que el agua alcance temperaturas más frías que las que se alcanzan en una ducha.

Activación del nervio vago para una sensación de calma

Cuando nuestro cuerpo percibe un factor estresante, ya sea estrés relacionado con la vida diaria, el trabajo o amenazas potenciales a nuestra supervivencia, responde liberando la hormona del estrés, el cortisol. Sin embargo, una vez que la amenaza se ha disipado, el nervio vago toma el control amortiguando la respuesta al estrés. La activación del nervio vago suele ir acompañada de una sensación de calma.

Los baños de hielo, al sumergir todo el cuerpo en agua fría, permiten exponer completamente el nervio vago a temperaturas muy frías favoreciendo así su activación. Esta ventaja es difícil de conseguir bajo una simple ducha.

Los baños de hielo son mejores que las duchas frías para la recuperación después del ejercicio

Después de hacer ejercicio, los baños de hielo pueden ayudar a reducir el dolor muscular. Esta reducción del dolor muscular acelera la preparación del cuerpo para una nueva sesión de ejercicio, lo que potencialmente mejora el rendimiento. El dolor muscular retardado, comúnmente conocido como DOMS, se reduce significativamente con la inmersión en agua fría, según los resultados de un metanálisis reciente. Este método es más eficaz a temperaturas entre 11 y 15 grados centígrados durante un período de 11 a 15 minutos.

Los baños de hielo superan a las duchas frías en este sentido, gracias en parte a la confianza y determinación que vas ganando gradualmente. Una ducha fría es beneficiosa, pero alcanzar el nivel de comodidad necesario para sumergirse en agua helada fortalece tu percepción de recuperación, tu fortaleza mental y tu confianza en ti mismo.

Además, la evidencia sugiere que la inmersión en agua casi helada estimula la producción de glóbulos blancos, componentes clave del sistema inmunológico, que ayudan a combatir las infecciones.

Los baños de hielo pueden promover la pérdida de grasa y estimular el metabolismo

Además de su efecto en la recuperación post-entrenamiento, la exposición repetida al agua fría puede favorecer la pérdida de grasa. La exposición frecuente a temperaturas más bajas se asocia con un aumento de la grasa parda en el cuerpo, que es distinta de la grasa corporal normal. Esta grasa parda promueve la regulación de la glucosa y los lípidos, lo que mejora el metabolismo.

Según una investigación, el Dr. Dino Premilovac de la Universidad de Tasmania explica que "la exposición prolongada a un ambiente frío hace que nuestro cuerpo produzca más grasa parda". Continúa diciendo que "sus efectos se parecen más al músculo que a la grasa clásica". Esta transformación es el resultado de la adaptación gradual del cuerpo y no se puede lograr con una simple ducha fría al final de la rutina.

La inmersión en agua fría puede prevenir la demencia y la pérdida de masa muscular

La natación en agua fría se ha relacionado con la producción de una proteína llamada RBM3, que puede retrasar la pérdida muscular al estimular la síntesis de proteínas. Esta proteína también tiene efectos neuroprotectores.

Un estudio realizado por la Universidad de Cambridge comparó a nadadores habituales que hacían ejercicio en agua fría con practicantes de Tai Chi, un deporte que se practica en un ambiente cálido. Los resultados revelaron niveles significativamente más altos de proteína RBM3 en los nadadores, mientras que no se observaron rastros de esta proteína en los practicantes de Tai Chi.

La inmersión en agua fría puede promover un sueño reparador

Dormir bien por la noche es esencial para cualquier plan de bienestar. Cualquiera que sea su objetivo, ya sea perder peso, aumentar la fuerza o reducir la ansiedad, dormir lo suficiente es crucial.

La evidencia científica ha confirmado que los baños de hielo y la natación en agua fría mejoran la calidad del sueño. Esta mejora no es el resultado de un efecto placebo; ella es real.

Elija baños de hielo en lugar de duchas frías hoy

La inmersión en agua ejerce una presión hidrostática que ejerce un efecto compresivo sobre el cuerpo. La inmersión en agua helada, particularmente como en los baños de Icepiration, ofrece beneficios adicionales para la reducción del edema, el manejo del dolor y la optimización del volumen respiratorio. Los baños de hielo tienen muchas ventajas sobre las duchas porque aseguran un control preciso de la temperatura del agua, lo que aumenta su confianza en el procedimiento.